No es el precio. No es la dificultad. El enemigo silencioso del golf es… el tiempo perdido. Según un estudio de la United States Golf Association, 1 de cada 3 golfistas deja el deporte por culpa de rondas eternas, tediosas y frustrantes. Y lo más curioso: el 70% de los jugadores no sabe por qué juega lento.
¿La culpa? No es solo del amateur que pierde bolas entre los árboles. El problema real está en rutinas innecesarias, tan lentas como inconscientes, que repiten incluso jugadores profesionales.
En el RBC Heritage 2023, Patrick Cantlay tardó más de tres minutos en dar un solo golpe. Su lentitud fue tan notoria que Brooks Koepka no dudó en criticarlo públicamente. Y no es para menos: las rondas se alargaban hasta las cinco horas, arruinando la experiencia para todos.
Pero no todo está perdido. Existe una solución práctica y efectiva: el método de los 90 segundos, creado por el entrenador Dave Pelz y aplicado en el Corn Fairy Tour con resultados sorprendentes.
- 30 segundos para analizar tu golpe mientras juegan tus compañeros.
- 30 segundos para elegir el palo y tomar la decisión.
- 30 segundos para ejecutar tu swing.
- ¿Perdiste la bola? No uses más de 90 segundos en buscarla.
Bryson DeChambeau aplicó esta técnica y logró reducir 15 minutos por ronda. Un cambio simple que puede transformar tu experiencia de juego (y la de quienes te rodean).Porque jugar más rápido no solo hace el golf más ágil, lo hace más disfrutable y accesible para todos. Y quién sabe… tal vez con 90 segundos por jugada, volvamos a enamorar a esos golfistas que casi tiran la toalla.