En la casa club del complejo Santa Marina, en Revilla (San Vicente de la Barquera) no sólo se dan cita los amantes del golf, sino también los de la buena gastronomía, esa que mima el producto y, en este caso, ensalza además los sabores tradicionales de nuestro territorio. Y es que aquí no hace falta ser socio del club para acudir al restaurante, es suficiente con realizar una reserva previa. Después, solo queda sentarse a la mesa y disfrutar.
El pasado mes de noviembre se presentó como una ocasión perfecta para visitar el complejo y acercarse a los platos de sus primeras jornadas gastronómicas, dedicadas a la alubia. No es de extrañar que nuestro establecimiento se haya estrenado en este formato temático con esta popular legumbre, ya que los guisos –junto a los arroces– son sello de identidad de la casa.
De que brillen con luz propia se encarga nuestro equipo de cocina integrado por Rafael Cayuso, Julio Díaz, Naiara Gil y Khalid Toussi, quienes son responsables también de haber dado forma a este menú especial que se compone de tres pases: ensalada, tres legumbres a elegir de primero y tres opciones de segundo –entrecot o solomillo de angus, merluza al horno o a la plancha o bacalao a la barquereña–.
La oferta estuvo disponible los mediodías de los viernes, sábados y domingos durante el mes de noviembre, por un precio de 20€ –café, postre y bebida aparte–.
Cada semana, un plato
Cada semana los tipos de alubia y las recetas fueron cambiando, claro ejemplo del excelente manejo y conocimiento del producto tras los fogones, así como de la versatilidad de la legumbre para ofrecer interesantes alternativas gastronómicas.
Alubia verdina, canela, canaria o plancheta, fabada, carico montañés o caparrones riojanos son algunas de las variedades que, tras su paso por los pucheros, se convierten en verdinas con pulpo, fabes con almejas o en nuestro popular cocido montañés con su compango. Sin tanto nombre propio, también se preparan con otros pescados, mariscos, carnes, matanza… La lista es interminable.
Igualmente, indica Mariano Saiz, gerente de Golf Santa Marina, también se elaboran habitualmente otros platos de cuchara, como por ejemplo la lenteja caviar.
Reseñables son también los ya citados arroces, entre los que sobresalen el de pulpo y gambón, el de setas y morcilla y el de bogavante; los entrantes y raciones, con la destacada presencia de Laura García, cortadora profesional de jamón; y los postres caseros, donde son recomendaciones de la casa la torrija brioche caramelizada, el brownie de chocolate y la tarta de queso.
Nuestro restaurante cuenta con un elegante comedor con capacidad para unas 70 personas –opción de habilitar un espacio privado para unos 20 comensales–, unas excelentes vistas del campo de golf y una acogedora terraza exterior. En todos ellos, el cliente disfruta de un servicio atento y cuidado a cargo de su equipo de sala, formado por Rubén Fernández, Pi López, Miguel Higuera y Silvia García.